Cruising Chula Vista a tad.

Veo una comunidad más relajada en la cuestión lingíüí­stica.

Uno se deja llevar por lo que dicen los medios cuyos estereotipos abundan y opacan el ámbito social con una especie de hollí­n urbano; poder escuchar una plétora de voces de la torre de Babel en ésta ciudad moderna sanduiegina es causa de sorpresa. Esto sugiere que existe una especie de seguridad en uno mismo que no habí­a visto antes por estos lares.

Estoy consciente de la presión lingíüí­stica entre el inglés y el español en esta área de SD. Una de las señas más obvias de ello es la constante falta de ortografí­a en los letreros de anuncios tanto de firmas grandes de los EEUU como de los individuos que componen esa sociedad. Este disinteres for corregir errores en la lengua es seña que indica lo extranjero y ambas lenguas regularmente hacen uso de esta forma de atraer el criticismo lingíüí­stico para definir algo rasgo de identidad.

La presión de abanderar un idioma pesa de manera exagerada por estos rumbos porque hay que escoger lados, o se es de aquí­ o se es de allá. Mas hay una presión negativa en particular y esas son las opiniones que se forman entorno a las supuestas cualidades del idioma que se habla, que si se es culto o no o que mejor se decidan por uno o por el otro.

La presente ironí­a en las campañas lingíüí­sticas como el de English Only es que argumentan que para triunfar en los Estados Unidos se requiere del inglés. Hay pocas libertades individuales coartadas en los EEUU y una de esas es la libertad de escojer el idioma que uno quiera hablar en paz y calma. Y es que en los EEUU hablar otro idioma es sinónimo de traición. De hecho son pocas las personas que navegan el mar del bilingíüismo en Tijuana y San Diego a pompa y vela sin sentir remordimientos por esos sentidos de culpabilidad que las maquinas propagandí­sticas del DF y Washington insisten en recordarnos lo inculto que somos. Me preguntaba un amigo sobre este simil que acabo de utilizar. Y dijo que si no podí­a haber algo más cercano para localizar la metáfora un poco más. Le contesté que Mexicali no sufre de la misma presión el peso lingíüí­stico de hablar español como idioma que Sacramento [cuestiones y problemas en los dialectos es otro ajetreo lingíüí­stico] ya que los gringos son los que sienten la presión del español. En California hay que integrarse a la sociedad; en BC no. En Baja California mandamos mucho a su a los que llegan con sus mamadas de sentirse superiores. No estamos a la defensa acá, pero allá la cuestión es existencial. La ironí­a otra vez pues, ya que en California se puede tener éxito sin inglés y eso les duele mucho a bastantes.

Yet Chula Vista is so much more. Ahí­ lo que me gusta de los mexicanos es esa seguridad en sí­ mismos cuyos cimientos de identidad están sólidos. De hecho existe una franja que es entre esa seguridad en la identidad y el inicio del canto de que es necesario saber inglés para tener éxito en California. Las caracterí­sticas son sencillas de reconocer, por ejemplo, los hispanos empiezan a dejar de ser seguro en si mismos y ocultan bajo un velo ligero el hecho de que uno es más de acá que de allá en el sentido de que dar indicios de la nacionalidad de uno. El Good morning, hey, smiles and all that shebang that tags along the morn as passerby’s meet is the police that regulates the fabric of the US. One is expected to start applying certain cordial chores to reenforce this identity.

Recuerdo mis experiencias lingíüí­sticas en California con nitidez singular. En la mayorí­a negativas y es por eso que uno trae con sí­ esa visión difusa al respecto. Siempre me daba cierto espasmo de angustia verme balbuceando español o limitando las situaciones en que me veí­a usando el idioma de Cervantes.

English was the mask that thinly veiled my true and hidden identity. My security blanket. Esto era lo común en mucha gente que se refugiaba en el inglés para aparentar que “uno era de aquí­â€.

Es por eso que me sorpendre la soltadura de hablar multiples idiomas en Chula Vista. La gente me parece que ya no se preocupa en lo miní­mo por el arte del fingir.

En lo personal, hace mucho que superé ese agachismo que nos caracteriza a ciertos mexicanos al hablar español en California. Los agachados eramos cuidadosos de evitar una mala pronunciación en las palabras ingleses, tunefined for phonological excelency. Es bonito no sentir la brocha del extranjerismo pasar por la vida cotidiana de uno. Sí­ hablo español, sí­, hablo inglés, y qué? No temerle a la cultura anglosajona de los EEUU es refrescante en estas calenturas. Ignoro a los gringos, sus gritos exagerados y ese aire de superego que tanto daño le causa a la sensibilidad mexicana que no tolera esas expresiones de prepotencia en el tú común de los gringos. Me parece que la región está adquiriendo una madurez que es más que bienvenida ya.

Recuento. Entre este bullicio de linguas francas a la región broto una palabra spanglish como fauna de la tierra, “quaiyate”. Esta palabra es una especie de meztisaje o como se le dice en inglés, blend. Proviene de la palabra en inglés quiet, que quiere decir silencio y la palabra cállate en español. Se utiliza como sinónimo de cállate más que nada ya que se usa en el imperativo.


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Sjí¤tte dagen

Pues ya se fue una semana. La gente tiene relojes Casio aún, de esos digitales de plástico negro que traí­a loco a Tijuana allá por los 70’s. Los que rifaban eran los de la pequeña calculadora. Era el laptop de la plebe, bien tecnologí­a último minuto. Entre más botones más chingón. Fue el empiezo de la maldición de que no se podí­a usar calculadora para hacer matemáticas porque era hacer chapuza, y el reloj se prestaba para hacer todo tipo de chapuza, pues era pequeño. Después salieron los de metal, entre más pesaban era que de seguro traí­a funciones más avanzadas todaví­a. De hecho no exagero al decir que el reloj ese representa el inicio de la tecnologí­a que se podí­a traer con sí­. Uno ya ni piensa así­ pero no todo el tiempo hemos tenido mp3’s, móviles o cámaras que fácil caben en los bolsillos.

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Me compré unas camisas que tienen un bordado curado que dice Tijuana. Tiene unos aureles dorados y se mira con una alusión a lo naútico. Mas desde que me la puse traerla en Tijuana como que no tiene chiste ponerme la camisa. Me siente fuera de lugar y cómo que nada más no va con el estilo de la ciudad. Geek comes to mind.

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Lo absurdo del todo es que disfruté del show. Habí­a comprado boletos para The Last Dance, como no sé ni que pedo con el Jai Alai ya, terminé en un noisefest. Nice, pero yo querí­a ver The Last Dance. Good neopunknoise if one wills. But I gather the tj-sd crowd is a hard pleaser. People rarely let loose to the agressive noise. Tampoco fue el más original del todo. La última banda que todo se llevó el premio de neopunk agressive noise. Old noise came to mind, de hecho una banda de esas pareció haberle robado el espiritú de la rola de Stigmata de Ministry. La plebe sabe cuando una piraterí­a está en progreso pues.

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Miro, escucho y veo volar los aviones que salen del aeropuerto de Tijuana.

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tj de cora

Las rayas de tu personalidad
Filosas
Cual
Arma
Blanca
De
Doble filo.

La fila
Para
El piquete
de la impaciencia
Mortal.

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Quinto dí­a

Es sorprendente entrar a paí­ses con pasaporte en mano. Uno es visto de otra forma. Entrar a México como mexicano es toda una experiencia. Mexicano, ok, paséle. Decir qué nacionalidad lo encubre a uno una especie de velo que nos protege y da acceso al conciente de uno. Entrar a los EEUU desde Tijuana también lo es, pero ahí­ están a la defensa todo el tiempo. Por ejemplo, los gabachos se admiran de la tecnologí­a que cargo en mis papeles. No todos los dí­as ven a un tijuanense cruzar como sueco, por ejemplo también.

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Me quejaba de la vestimenta de los defeños. Mi queja es que no tienen gusto por las modas y no hay un sólo estilo que domine el ambiente, pero quizá exagere un poco. Lo que domina es el traje de los tantos burocratas que cruzan las calles de mi DF. O sea, el Centro Histórico. Mas a la vez la moda de las calles que recorro dicen mucho de esa cultura del usted que predomina en la capital. No así­ Tijuana.

Cuando se es nativo es facil de ver esta diferencia. Entre los nativos hay varias preferencias por el estilo de vestirse. El mas clásico es el del cholo, uno los wacha de volada, después siguen los del heavy metal, punk rock, gothic y los norteños. Vestirse de cierta manera en Tijuana significa que uno ha escogido un estilo de vida para definerse como inviduo entre una corriente de moda que permanece casi de por vida. Uno se identifica mucho con la música por estas tierras.

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Aunque tengo diferencias ideológicas con el Frontera da gusto levantarse por las manañas y chingarse un cafe leyendo el matutino de los Healy. Hay mucho de qué criticar al Frontera pero en ciertos aspectos presentan nuevos modos de solucionar problemas que Valencia del Mexicano carece. Lástima que no sepan ostentar poder ya que ellos forman parte de una cadena que nada más no los deja explotar su potencial. Lo peor tantito es que no se definen, ni de Izquierda o de Derecha. Todo su contenido contiene productos que claramente favorece a los conservadores azules. Quizá sea demasiado problema en México explayarse por una corriente ideológica. Pero nada más porque no lo anuncian a los cuatro vientos no quiera decir que uno no sabe que corrientes de tinta corren por ese diario.

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Pasé la mayorí­a del tiempo con ellos, los pocos vagos del terreno que aún quedamos. Tomé fotos, pisteamos y recorrimos los anales del pasado en un momento placentero para mi. Lástima que no aguante tanto ya si no me hubiere quedado más tiempo con ellos. Muchos de ellos, sin embargo, están gastados de tanta droga. Mi barrio sufre cambios por todos lados y los edificios que conocemos como el barrio carecen de futuro estructural. Estoy casi seguro que tarde que temprano el futuro de esos edificios será el dompe de cemento viejo.

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Qué loco es cruzar la lí­nea a pie por estos dí­as. Creo que alguien está dando micas como un xmas gift o algo por el estilo. Pero si es una exageración que abusa del sentido de la palabra exagerado. Quizá sea muy fácil sacar papers estos days. No hay manera de explicar el flujo de personas al otro lado como peatón.


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IV day

I had a terrible accent on yesterday.

I was speaking English with a thick Spanish accent. I paid little atention to the phonological properties I usually use. Boy am even scared I actually do sound like that when I speak English. I also realized that to really speak native like I must use some level of strain to achieve said effect. I don’t know, however, how much truth there is in that. It felt more natural to speak that way yesterday but perhaps today is another day and the accent I had on yesterday was just an easy way out for my brain to slow down work a tad.

There is a lot of recent research on bilingualism these days that I no doubt say so influenced by said research. I particularly like the one that says that bilinguals can concentrate more. This supports somewhat my previous comment because the research suggests we manipulate our brain in other ways than monolinguals do.

I was even apoligizing to David, author of Refried Gringo, about my English. I was at the Dandy del Sur and I found him there, like all times I pass by el Dandy del Sur. I like him. He represents a sector of Tijuana that, of what I know, no one touches upon to even dare suggest that we have a gringo population in Tijuana which lives in Tijuana. And they long ceased to be passerbys’. They live, work and have families, a story to tell, citizens or denizens which form the very fabric of our miliue. Yet they are incredibly absent from the intrahistoria, as Unamuno said, of the population. So I talk to him and see a little how the gringo population of Tj is doing. Even more surprising is that he frecuents a bar that is well known for the so called litterati of the town. These people of the Spanish letters who offer no measure of restraint in describing Tijuana or detail its wonders are bliss in ignorance as to what is in their immediate surroundings.

I love his tj anecdotes which mixes experiences suffered at the hands of opposing agents and faced with the government diatribes meddling in the everyday. He oftens describes how it is to live trying to serve two masters, the mexican and the american, and how this affects even family ties. His anecdotes blend in classic tj with an American perspective that paint a landscape I can easily traverse across it.

This linguistic barrier is impenetrable and it is one of frontiers we tijuanenses seldom succeed in crossing over. Much has to do with the stupid nationalism that impreginates the mexican ens. I read in some literature blogs that we even have a body of mexican English literature, some as far as Monterrey. I suppose that to acknowledge said literature as mexican is deemed an offense. I hope this sort of mentality is on the decline. It forms a current of thought that is inalienable from the stream of conciousness of México, in particular a body that is ours, we from the northern states.


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Tredje dagen

De la estación llamada Copilco en el sistema del Metro de la ciudad de México, a la biblioteca Central de la UNAM, hay de por lo menos kilómetro y medio de por medio o más quizá. El primer dí­a de mi estancia tuve que hacer el peregrinaje a la susodicha biblioteca cuya fachada me deja de a seis everytime.

Carlos Martí­nez Moreno fue el impulso. Es la segunda vez que lo visito. O por lo menos el libro. El sistema Dewey que utilizan ahí­ lleva la cifra decimal de PQ8519 M36 B42 con la barra de código del 213973.

Es uruguayo. El libro se titula las Bebidas Azules publicado por las editoriales de Monte Avila, Caracas, Venezuela.

La primera vez lo agarré al azar. Desde entonces no ha dejado de liberarme de sus garras literarias.

Las Bebidas Azules es un libro de Relatos. Si Martí­nez Moreno fuera bloguero hoy estarí­a en el desconocido. La publicación que yo leo dandoseme la oportunidad data del Abril del 1969. Proto Minifix if one wills.

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Salgo presto a Tj tomorrow. Y para cuando esto esté publicado ya estaré ahí­. Nunca me la he pasado tan aburrido en el DF como estos dí­as. Aunque eso no quiere decir que no los disfrute. Los vientos de la tardes, a eso de las 4 o 5 de la tarde que hací­an placenteros segundos, minutos, soportable, la estancia en la ciudad, hací­an milagros inesperados. El viento limpia. Me acordé mucho de mis amistades defeñas pero por miedo a mi presencia fí­sica no me anime jamás a llamarlos. No es que este feo, nada, pero … los pasos de los años calan.

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Quiero empezar a escribir, a crear cosas, esto de escribir diarios no me pasa de la nada. Lo que se cocina en esa frase se está psicologimente en mi, llamemoslo el devenir de la conciencia creativa, gestionando, lo que algunos gringos llaman como incubation. Something is to hatch. Esto de escribir requiere de tiempo, hay tantos aspectos que considerar al escribir que hasta ahora caigo que no es nada más de plasmar unas letras sino que hay que formular, manipular y negociar con el consciente, ordenar el pensamiento. Como si fuere el alma que utiliza el cerebro para sacar una especie de molde a la idea, la persona que sale al hablar, dar el mensaje. Caigo en cuenta que las palabras en si, no ya desde mi perspectiva individual, sino ese ingrediente para darnos a entender, el abecedario de nuestra cultura, son el alterante de mi realidad. Le he tenido cierto rechazo a las letras como parte del repertorio de mi ente, pero creo que voy entendiendo poco la importancia de seguir escribiendo.


Dí­a dos

Los mosquitos hacen merienda de mi. Cuento las ronchas, me rasco. Como la incertidumbre de salir de Suecia, esa sombra que redondea detrás de mis acciones. Cuyo piquete es mordaz. Venir a México no significa nada ya, ¿a qué? me pregunto.

Mucho más estar en México. Nunca habí­a sentido el grado de nihilismo que siento hoy por la vida como hoy. Mas creo que la frase anterior exagera un tanto. Me parece que una metáfora de agua serí­a mí s conveniente en este punto. No que tenga nada que ver con el agua. Si no que siento mas ser parte de un flotsam and jetsom, que se deja llevar por la corriente, el optimista arguye, por lo menos el agua fluye, el rí­o, el mar, los océanos de la vida if you will.

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Veo que México sigue con la obsesión de la purificación de la raza, como nunca antes o mejor dicho sin interrupción. Me molesta ver tanta gente blanca dominando las esferas mediáticas en el arroyo que constituye nuestro diario devenir. Qué dice de nosotros los mexicanos tanto anuncio de gente blanca diciéndonos a nosotros la ‘verdad’. A la misma vez me pregunto si no es sólo una óptica corrupta de mi parte. Los bajacalifornianos tenemos una inculcación de sospechar de la pobreza inigualable.

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Las palabras me acompañan, una compañí­a inusitada, sin saberlo, han estado ahí­, durante todo el viaje. Siempre he viajado sólo, sin amistades, como la maldición del judí­o errante, así­ yo en mis recorridos por el mundo occidental. Sólo. Ya no me molesta, antes no me resignaba ante el destino mio: viajar sólo.

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Siempre he querido tener amigos, pero por cuestión de mi destino, viajar, y sólo, nunca he logrado mantener una relación amistosa con nadie, sólo con las mugres palabras que hasta en veces ellas me abandonan a mi destino.

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La ciudad hiede. Me sorprende, aún, con tanta riqueza disponible y con tanto orgullo por lo ‘mexicano’ las fachadas de la mayorí­a de los edificios lucen catastrofalmente sucios. Vi a uno limpiando las fachadas, a mano! Gente que gana máximo dos salarios para ello. No hay cultura de la limpieza, deberí­a de haberlo, pero no lo hay. Aunque hay que confesar, hay menos mendigueo, escuche por ahí­, sin embargo, que la gente vive arriba de sus medios.

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Vi el partido MX-EEUU. Los locutores casi coreaban una perdida, esos locutores se enfocan en lo negativo y es que cuando un mexicano empieza con esos pensamientos inhigienicos no hay de otra, uno va a perder.

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El DF es grande y hay bastante qué hacer mas yo no encuentro nada qué hacer, así­ es la vida pues. Vagabundeo por sus calles, sin destino, sin meta alguna, sólo entre la gente, de todos tipos. Entre mí s gente mí s mejor, La cultura institucionalizada puede esperar aún más.

Day One

I realized how weird it is for me to speak my native languages outside the restricted areas of my life. I for one seldom use Spanish as a means to communicate in Sweden. I have one, two at most, people where I tend to flush out the Old Cervantes and imposible bard out in full force, I rather tend to do this via the written means, hence my blog in Spanish. English I use mostly at home to speak to my life partner whom has to endure a host of diatribes for using bad phonology in her English. Yes, I confess, I inevitable end up being some sort of language police for her. I have, though, realized my actions lead nowhere and I try and avoid commenting on her ‘mistakes’.

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There is a mirror here at the Lafayatte Hotel in México City that makes me look rather fat, not that am not, mind you. But I dislike it either way, too much a truth at once can be to much reality for the brain and ego to mull at one single time, right?

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I was surprised this day, this is my first day in México, arrived at the wee hours of the morning and had to wait for the hotel management to give the ok for a room. Cleaning chores what not, but as I waited I took a stroll to the Cathedral and lo and behold there I found a former teacher of mine from Stockholm University´s spanish department. Shit, how often that happens? I admire this guy, he is a poet in Sweden. But he did not know the hornets nest he came to in México, his route includes Oaxaca, oops, broil and more broil I said.

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El Metro a las 6 de la mañana no es para gente mediaclasera, creo que hasta repulsión de viajar en el Metro a esas horas existe pues no hay nada más que pobreza viajando a esas horas por el Metro de la lí­nea 1 y 2. And I definitely still think defeños lack a fashion sense.

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I stopped at the Zocalo, as I always do when I come to México City, and I rested smack nearby the mexican flag. Boy is the federal government peeing in its pants or what? They were sardos galore everywhere huffing and puffing their stupid psych ops to the crowds, what the? Then, as I was killing time because the hotel hadn’t fixed my room yet, this guy out of the fucking straight blue came by telling all kinds of weirds stories. The guy is from Sonora, that much I am certain of, he had the lingo for it, but the rest man, this guy had been in Nam, a lego soldier, an investigator and knows a wee bit about Hank Rhon’s personal secretary and sheees, this guy owned several stores and uff, all the while I kept asking myself, well, if you are so rich why is your leather belt so britlle and worn out? I tell you, and worst of all, this guy purpoted to have german blood in him, he kept ranting about being on time blah, blah, jí­jole, the kind of bullshit one can endure in less then half and hour at the Zocalo, straight out of the blue.


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No nos cairí­a mal

The Hatch Act of 1939 is a United States federal law whose main provision is to prohibit federal employees (civil servants) from engaging in partisan political activity. Named after Senator Carl Hatch of New Mexico, the law was officially known as An Act to Prevent Pernicious Political Activities.

De reciente me he visto admirando la ley Hatch de los EEUU. Y es que uno de los males de nuestra quezque democracia, o democracia de por mis huevos, es la burda y descarada intromisión del gobierno tanto estatal como federal en las elecciones que se dan en México.

La ley Hatch de EEUU simplemente y de manera sencilla prohí­be la intromisión de los empleados del gobierno federal en las elecciones cualesquiera que estas sean.

Dream on baby. All we get is toothless pieces of paper that don’t even pave the way to it …

Tijuanapress.-Los funcionarios de los tres órdenes de gobierno estarán en la mira de la Secretarí­a de la Función Pública durante el desarrollo del proceso electoral en Baja California. A través de un programa de ”blindaje electoral” iniciado hoy por los gobiernos estatal y federal, se busca que los funcionarios no utilicen recursos públicos a las campañas polí­ticas. El ”blindaje”, consiste en el intercambio de información sobre los sistemas preventivos de vigilancia con el propósito de aumentar la transparencia y el combate a la corrupción.


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Ni se las olieron

En los foros de polí­tica mexicana se cuenta que dicen las malas lenguas que Mario Villanueva Madrid, ex gobernador de Quintana Roo, era un as baja la manga del PRIAN para controlar al viejo dinosaurio del PRI.

Y es que ese ejemplo mediático de seguro tiene más que asustado a dos que tres gober preciosos en México …

Y es que si el 2 de Julio demostrará algo es que Calderón se ha sostenido poco menos de año en la silla lo cual significa que otro más ni quién haiga para detenerlo.

Y es que los Chuchos de Nueva Izquierda del PRD supieron, dicen los que saben, jugar sus cartas …

Pues al empiezo de la función las puertas se cierran, y como dicen los gabachos, el PRD painted itself to a corner.

Aunque esa sólo sea una interpretación de las muchas que hay en la tabla del Ouija.


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Omar Pimienta

We have a very nice snippet of a side of Aztlán we seldom get to hear. Yes, there are countless of stories about how we came to be in Aztlán but very seldom is there any picture or specific location that pin points the odyssey. A fellow conciudadano of mine, Omar Pimienta, he of the Bookleggger collection has done it again, here he presents us with a new version of how things really are.

The old classic one from the Booklegger Manifesto:

The bookleggers manifesto:
Border scholars Javier Durán and Juan Carlos Ramí­rez-Pimienta have theorized the notion of “educated” Mexicans residing in the United States, Mexicans who have emigrated to the United States as well as to U.S education during their formative years and who are referred to as “Wet Minds”. The natives of the Mexican northern border states, many of whom have been pushed abroad by centralist education, cross the border on a daily basis. Since this phenomenon of the “Commuter minds” first occurred, the US immigration officers have been on the lookout for books as incriminating evidence for the crime of getting educated.

Many imprudent prospective “Commuter Minds” get caught and their rights to cross the border are taken away.

Our job is, as Capone once stated, to supply a demand.

We are the bookleggers.

Octavio Castellanos
Omar Pimienta
Clavo: Juan Laguana