arder diacrónico

El problema de James Joyce en Portrait of a Young Artist: el exorcismo. James o Dedalus, escoge el que quieras, es el cristianismo. Por toda la novela las inculcaciones de la fe católica lo asaltan. El desarrollo como persona de Dedalus tiene que pasar por las puertas del infierno que representa el salirse de las buenas inculcaciones. Dedalus sufre, es torturado mentalmente por sentir lo que D.H. Lawrence acusarí­a de tibieza carnal. Mas es válido el proceso de Dedalus descrito por la pluma de Joyce.

Estos demonios que le acosan son de sumo interés para mi. Quizá porque sufrí­ un acoso similar a los 13 años. Insulté al Espí­ritu Santo. Según la biblia Marcos 3:29

”¿Cómo puede Satanás expulsar a Satanás?
24 Si un reino está dividido contra sí­ mismo, ese reino no puede subsistir.
25 Si una casa está dividida contra sí­ misma, esa casa no podrá subsistir.
26 Y si Satanás se ha alzado contra sí­ mismo y está dividido, no puede subsistir, pues ha llegado su fin.
27 Pero nadie puede entrar en la casa del fuerte y saquear su ajuar, si no ata primero al fuerte; entonces podrá saquear su casa.
28 Yo os aseguro que se perdonará todo a los hijos de los hombres, los pecados y las blasfemias, por muchas que éstas sean.
29 Pero el que blasfeme contra el Espí­ritu Santo, no tendrá perdón nunca, antes bien, será reo de pecado eterno.”

Ese acto no tiene perdón alguno. La tentación fue demasiada para un cerebro compulsivo como el mio.

No quiero comparar mi experiencia religiosa a tan temprana edad en mi vida con la de James Joyce, aunque los dos seamos victimas de la fe de los cristianos. Sólo quiero compartir con él el infierno que los dos pasamos en nuestras respectivas vidas.

Aparta tiempo 112: el cuartar privado de las letras

* Siento algo muy positivo, muy alegre dentro de mi.

Esto de que mi sitio se ha caido me ha dado repuntes. No aguanto las ganas de utilizar nueva tecnologí­a. Estoy muy cerca de empezar a trabajar con otros medios para expresar mi punto de vista. La computadora mientrás que consume una inmensidad de tiempo al grado de alejarme de la lectura de libros significantemente también me abre los sentidos a otras alternativas. No voy a negar que sufro del sí­ndrome del protestante, veo la computadora como el pecado que se me ha inculcado es, la computadora es un mal en la vista de la doctrina del protestante, es una perdida de tiempo y eso lo llevo dentro de mi. Mas a la vez me entusiasman mucho las posibilidades. Por eso me alegra que pronto dispondré de mejor equipo y de mejores programas para hacer lo que se me de la relagada gana con mis letras.

Trabajar con letras es un desastre, más cuando lees las letras de los neoconsagrados. Las letras siempre causan disgustos entre quienes laboran en este menester. Nacen discordias, nacen sentimientos contrarios, a base de una competencia: a ver quién sale primero, a ver quién atrae la atención no ya la del público ni de las casas de publicación sino de el mundo de las alabanzas. James Joyce y D.H Lawrence vienen a la mente.

Esto del blog presenta un dilema: va en contra de la noción de la escritura. Muy pocos regresan a pulir lo que han escrito antes. Lo que impide esta acción esencial es la misma naturaleza del blog. El blog requiere, es una de sus tesis centrales, que sea alimentado diariamente. El blog es bueno para la opinión repentina, para el pensamiento instantaneo, para tapar el agujero por donde las ideas se fugan. Mas no para guardar para un futuro próximo. Lo que impide esto es el público que un blog tiene. Ese público demanda lo nuevo, lo fresco el aquí­ y el ahora, no tiene tiempo para el pasado, quizá esto sea una aproximación a la conquista del único tiempo que la humanidad no ha podido conquistar, el presente. Y es ahora cuando más miro al pasado.

C’est Fatale: est voire différente

Mientrás que nuestras amigas femenistas allá en Tijuana juegan el juegito que Bugs Bunny inventó dibujandole bigotes a todos, acá en el continente escandinavo suceden cosas verdaderamente dignas de ser imitadas por todas las mujeres del mundo. Realmente no sé a qué va el juego ese, quizá no sea tan inteligente como mis pseudo conciudadanas Cristina Rivera Garza y la poetiza Amaranta Cabellero (ninguna de las dos aparenta ser de Tijuana) para descifrar este tipo de rebelión femenista. Pero dejémoslo ahí­, quizá Nerthus me ilumine algún dí­a.

Pero pasemos a lo verdaderamente interesante para los que nos gustan las cuestiones del femenismo y el poder. Pues nada, que resulta que la semana pasada salió un partido femenista a desafiar al poder aquí­ en Suecia. Las ideas que traen las sacaron de un libro de unas chicas interesantes cuyas ideas sobre la estructura del hombre dejan ellas muy bien en claro cuales son.

APM: antipatriarkalt manifest que cualquiera puede traducir a su idioma, es una idea que salió de un intercambio de emails entre unas jainas de acá del norte éste. La una se llama Maria-Pia Boí«thius y la otra Maria Lindhgren. Ya habí­a escrito de ellas anteriormente aquí­.

El caso es que algunos formaron un partido polí­tico a base de ello. Maria-Pia Boí«thius no querra saber nada de ello, no cree en los medios, en la Main Stream Media. De ello se jacta en su libro de hecho, ahí­ dice que rechazó una entrevista, en una manisfestación, en la radio y dice, ”deje boquiabiertos a los babosos esos” pero en sueco, ”al rechazarles la entrevista. Qué, ¿no quieres tiempo en el aire? Ese fue el shock que recibieron los periodistas al recibir mi contestación.”

El partido se llama Iniciativa Femenista. Puedes leer más, en español, sobre ello aquí­.

Lo curioso es que en el mundo escandinavo no es el único partido que ha tenido o llamado la atención del mundo por ser un partido polí­tico justamente basado en ideas so llamadas feministas (no, no es un error ortográfico).

En Islandia ya habí­a sucedido una revolución más o menos ansina. Fue allá por 1983 cuando Kvennalistin [Lista de Mujeres] sacudió algunos huevos de macho por el mundo patriarcal. Fundado por Kristin Halldursdottir hoy es uno de los partidos de polí­tica feminista que verdaderamente tienen historia, veremos como les va a las suequitas estas.

Likea hasta que el rio de la verdad fluya

Si yo fuera reportero en México tuviere las orejas bien paradas. Sé de ante mano que no es cosa fácil. Ser reportero en México requiere de un tipo de atrevimiento que no se ha utilizado mucho ni creo que se haga cultura aún. Durante el mandato del ex presidente Carlos Salinas de Gortari este tipo instrumento del cual pronto daré detalles fue muy utilizado, sabí­a de antemano, el señor Salinas, como manipular la prensa a sus anchas de Chiapas hasta New York.
El utilizó los llamados leaks a sus anchas. Por eso, una de las caracterí­sticas más notables del gobierno del mal gobierno dirí­a el SubMarcos, es que la prensa extranjera siempre sabí­a primero de los pasos de Salinas muy antes que la prensa nacional.

Es por eso que a los reporteros mexicanos aún les falta practicar un verdadero periodismo para salvar sus propios pellejos. Saben pero callan. Esa es la verdad.

La cultura mexicana es así­, lo sé, conozco a mis paisanos y sé muy bien como se comportan y jamás arriesgarí­an más de lo que pueden por la verdad. La verdad es un lujo por estos dí­as aún más que en los tiempos del Dictador Dí­az.

Decir la verdad en México adquiere a veces un estatus de valentí­a sin precedentes. Se les realza como si fuera un ave rara que nunca es vista en el paí­s.

Es por eso que el gremio de los periódistas mexicanos sufre su peor deterioro y desprestigio en toda su historia hoy.

Digo todo lo anterior porque veo que en blog.com.mx alguién bien tuvo a poner un post sobre un periodista que lleva dí­as desaparecido.

Se trata de Alfredo Jiménez Mota. Sin duda el vilo en que tienen a la población es una artimaña de la Cosa Nostra como mi abue me enseño a denunciar ese grupo social, para intimidar a esa profesión, no lo dudo que así­ sea y de seguro eso es.

De hecho la página de la FAPERMEX ni siquiera menciona al susodicho periodista, he ahí­ la solidaridad.

Lo curioso es que en ese blog siempre resaltan los comentarios a galore, hoy brila por la ausencia de comentarios. No sé si se deba a que es fin de semana y México sé, esta pasando por todo un desmadre por estos dí­as. Aunque es menester enfatizar que si queremos un México más mejor no hay como empezar hoy.

tejidos de telarañorar

Van Gogh viene a la mente, es cuando me agarro la oreja como un tick, ha años que tengo la imagen grabada en mi imaginario y me da cierto espamo ver como se corta el oido. Por igual cuando come pintura, pero se ve la pasión, aunque eso no deja de darme asco. La locura puede llegar a esos extremos. También vi una pelicula, no hace mucho, en mi casa amarilla allá en el sur de Suecia. Estaba viendola en mi sofa azul sin nadie a mi alrededor. De por cierto, he llegado a la conclusión que soy de la peor clase de emigrante que pueda haber aunque eso no va al el tema. Era una pelicula del Marquis de Sade, creo que fue hecha inspirada en la novela del dramatista alemán-sueco Peter Weiss llamada The Persecution and Assassination of Jean-Paul Marat as Performed by the Inmates of the Asylum of Charenton Under the Direction of the Marquis de Sade. Aunque claro la pelicula no sólo trata sobre ese acto, aparece pero no es lo principal, lo principal es el acto prolí­fico de escribir del Marquis, al último termina escribiendo con su excremento en una celda donde sus pensamientos están plasmados en la pared despidiendo un olor desagradable. Esa imagen también me produce nauseas.

Sí­, lo peor. Hay immigrantes que se adaptan muy bien a sus alrededores y se vuelven ciudadanos prominentes de sus localidades, de su nuevo paí­s. Su nuevo pueblo los admira. Yo no. Yo me rodeo del pasado, de la añoranza, me visto de resistencia y camino con mi soledad como la amante que me ha sabido querer de tanto andar con ella. El futuro ni lo veo de tanto tener la mirada en un deseo y dejo pasar el presente con la facilidad que sólo un desaire puede otorgar. Mis ojos quizá tengan esa caracterí­stica de mirar al Otro como el Otro y no como mi vecino a pesar de que soy de aquí­.

gandallas del incognito ignorante

La verdad sea dicha el Oeste no puede ser imitable. No hay nada que pedirle al Primer Mundo ni a los paí­ses desarrollados. El Oeste se ha construido con mentiras, falsedades y le pide al Tercer Mundo competir con las reglas morales de la ética cristiana que ellos presumiblemente tienen pero que siempre han practicado al revés como tocar un disco de Black Sabbath al revés.

Un cuidadoso estudio de la civilización Occidental podrá demostrar a cualquiera que Occidente se ha hecho de sus ganancias económicas de manera sucia, siempre un paso adelante de los demás y después lavándose las manos para aparentar inocencia y cerrando todos los legal loopholes posibles para impedir que otros hagan lo mismo.

La supuesta superiodidad moral del Oeste, desde la segunda guerra mundial ha sido una fabricación social que ha sido manipulada por intereses oligárquicos y del poder oscuro (Maquievélico). No que haiga nada malo en ello, pero el deber de la verdad debe siempre superar lo falso, por obligación humana y tradición aunque la ley natural lo acceda tarde que temprano.

Deberí­amos hacer lo que ellos hacen, jugar bajo sus propias reglas. Deberí­amos pedir pruebas de que las cosas fueron obtenidas éticamente y si hay cualquier insinuación de duda su rechazo deberá ser eficaz y rápido. Rechazar los productos malhabidos deberí­a ser la primera prioridad de tercer mundo porque mientrás que el primer mundo se jacta de no ser corrupto y achaca al resto como corrupto el primer mundo es el primer exportador de corrupción a nivel mundial.

latidos con lápidas tumbadas

Aquí­ da el clima para todo, y hay un surplus de pensamientos ya. Se escucha el chillido de las gaviotas, hay comida. Los rí­os corren libres, es primavera y hay fragmentos de hielo flotando con rumbo al Mar Báltico, a ver si alcanzan a llegar í­ntegros, de Stockholm with love. Los miro alejarse desde el camino que cruza el Metro, los rieles en este puente arriba de los demás, abajo el tráfico de vehí­culos. La luz del dí­a, la ciudad y sus majestuosos edificios de hace dos siglos secuestran mi alma. El silencio, como la brisa que pintó la luz matutina, grisáceo extralight, donde el sol es albo y los cúmulos merodean las calles empedradas donde se mira que unos turistas ya deambulan apuntando con sus dedos los ornamentos barrocos de los edificios, llena los espacios de miradas vagas, miradas en otros sitios, miradas que no buscan otras miradas. No hay palabras, sólo la música turca que invade los tí­mpanos desimprovistos de lo espontaneo al subirse un hombre con un acordeón para pedir unas cuantas coronas. Miro hacia afuera, la ventana es lo único reconfortante ante esta espera, de punto A a punto B.

Es entonces que me acuerdo de las piernas de Elena. Mi amiga más í­ntima, con ella no habí­a nada secreto. Todo nos lo sabí­amos. Es ella la que mi mente busca en el reflejo de la ventana cuando lanzo mi mirada hacia el vací­o que la vista de la ventana del vagón me da cuando miro los edificios de Estocolmo.

Nunca la amé, nunca le busque hacer el amor ni tampoco me interesó saber más sobre el lunar que tení­a cerca del pezón en su seno izquierdo, su favorito, el cual, de por cierto, tení­a una historia larga, larga, que Elinitis, como le decí­a de cariño, me contaba cada vez que la mirada cambiarse de ropa en la botica en la que trabajaba. Sorpresivamente nunca me acusó de joto, ni mucho menos me reclamó que nunca le dijera que tení­a un cuerpo para hacerse varias masturbaciones en noches de soledad, sabí­a muy bien qué tipo de mujeres me gustaban y además sus amigas le vení­an con el chisme luego luego cada vez que sabí­an que me habí­a acostado con zutana o mangana, así­ nos gustaba, tení­amos a todos en vilo y así­ ella sabí­a de mi y yo de ella, siempre de lo que hací­amos nos lo hací­an llegar nuestras mejores amistades. Creí­an que andábamos juntos y así­ los dejamos creer, nunca desmentimos ni afirmamos nada. Nunca nos contábamos tampoco lo que hací­amos con nuestras parejas, creo que concordábamos mucho en que el sexo era uno de los actos más overrated como cuando me dijo aquella vez que perdió su virginidad y cuando concordé con ella cuando yo perdí­ la mí­a. Mas siempre me dejaba pensando cada vez que me me mencionaba ”y me quedé con él un rato” tras decirme que habí­a pasado la noche con tal y tal. Siempre me he sentido raro quedarme con alguien después de mis actos sexuales y me voy tan pronto acabo, nunca pude entender como es que ella sí­ lo podí­a hacer.

Creo que nuestra relación se debió mucho a que entre nosotros nuestros cuerpos descansaban de ese ajetreo de atracción sexual que hay entre mujer y hombre, de la carrera carnal de buscarse los buenos atributos entre sí­, buenas nalgas, buenas pompis, buenos senos, etcétera etcétera. Podí­amos ser quienes eramos sin miedo al tabú, ni las religiones ni nada, eramos, simple y sencillamente dos humanos que podí­an ser como tales, humanos. Y pensar que todo empezó por las piernas.

Estábamos los dos tomando el sol en playas de Tijuana, cerca de Punta Bandera, por San Antonio de los Buenos queriendo tostar mis piernas hasta que quedaran como las de ellas. Antes le habí­a mirado corriendo por las arenas mojadas unos minutos y note sus piernas morenas, prietas, con unos vellos negros, lindos, me miro mirándola y puntualizó las mí­as, que gíüeras me dijo, deberí­as de acostarte a mi lado, así­ se pondrán como las mias me dijo. Le hice caso sin más ni menos y así­, crecimos juntos descubriéndonos poco a poco hasta que llegó nuestra adolescencia, nuestra adultez joven. Realmente nuestro amistad nunca sacó a flote a discusión el del por qué tanta la confianza. No fue hasta que mi interes por la literatura japonesa, la cual llegó a mí­ como un correo retrasado que se anuncia hasta en los periódicos por la novedad de su retraso y llegada que me puse a pensar en mi sexual drive. Yukio Mishima discute mucho este tipo de sentimiento carnal. El deseo sexual, como la molestia que viene siendo. El peor acto de satisfacción que tanto pide para que dure tan poco. Una vez se lo confesé. El sexo me da flojera, le dije una tarde en pleno mes de Semana Santa y hasta elegí­ el dí­a, Viernes Santo cuando se dice que Cristo sufrió las tentaciones del diablo, mientras consumí­amos carne blanca. ”Es que no te has enamorado” contestó Elenitis, que es lo que me daba cada vez que abrí­a una nueva lí­nea de conversación en nuestro repertorio de free parlance. Pero te equivocas, agregó, porque Mishima habla más de como la sociedad japonesa tanto como la inglesa en ciertos respectos, a principios de siglo obligaba a todos los hombres casarse y tener hijos aún siendo estos últimos homosexuales, habla de sangre frí­a, de sacar venganza de viejas rencillas y rencores. El que sí­ demostró el tipo de amor al que te refieres es Kazuo Ishiguro en su novela Remains of the Day. Nuestras conversaciones duraban hasta meses sin interrupción alguna y bien podí­an pasar semanas sin vernos y todo parecí­a como si la conversación la hubiésemos dejado para pensar mejor las palabras que iban con el tema, así­ caminábamos también, nos í­bamos caminando por todo el Boulevard Agua Caliente hasta llegar a la Lázaro Cárdenas a veces sin decirnos ni una palabra por todo el camino, eso sí­, volteábamos al son de un reloj juntos cada vez que veí­amos la plaza de toros.

El Metro llegó a su destino y la voz del audí­fono me saco de mis pensamientos, hace 15 años que no sé de Elena, y mi corazón late rápido al pensar cuanto tiempo ha pasado desde que deje Tijuana para irme al extranjero.

A tropos lo de tropos

Los tí­tulos de blogs me encierran, serí­ase mejor no tener uno pero eso tampoco me ayuda, aunque el tí­tulo es atrallente, me suena a alguien atropellado, quizá es eso, un atropellamiento descarado, un hit and run. Estocolmo, las calles lucen bien pero cuando me dieron el madrazo era de noche. Babble, babble, ¿por qué no habrá una palabra en español que diga babble, siempre a lo exagerado, creo que una vez me lo dijieron, cállate, ¡deja de decir chingaderas! Y así­, las calles estas … larquitectura, Lorquiano, larquis, larquí­simo y bello. Las avenidas son algo especial, me recuerdan mucho a las avenidas de Paris. Vi en un programa que las avenidas de Paris se hicieron así­ de anchas para ayudar al ejercito, pero si calle es un termino militar, como ¿no? ¿Y el atropellado donde quedó? So cuando las construyeron las construyeron pensando en revolts, viva la revolución …. Tijuana ostenta de bulevares, son algo hermosos, su arena llena de hollí­n las hace especial. Nunca en mi vida he transitado Tijuana en carro, he viajado en carro de gorrón y he bajado desde el cañon K sin frenos hasta la Mutualismo pero que yo esté detrás de un volante nada más no, so transité las calles a pincel, en mis Dodge patas. Y miraba como la tierra mugrosa del paso de los automóviles dejaban atrás arena sucia como prueba de su paso, se siente un poco raro ser el único que camina esas calles pero algo divertido. Sólo así­ se da uno cuanta de como los vagos, alcohólicos y Marí­as viven. Esos si saben matar el tiempo. El atropellamiento se acabó.

Union Monetaria de la UE

Curiosamente hoy me encontre un penny al estar esperando la burra, (el bus para los no Tj), un calo como le decí­amos nosotros antes a los centavos gabachos allá en mi Tijuana del año del caldo. Pero no un penny cualquiera, este fue un centavo europeo. Es el gran alarde porque, una, estoy en Suecia y pues eso de encontrarse dinero en la calle y de la Unión Europea y en Suecia tiene su chiste y dos, me dice que la integración monetaria de la Unión Europea está saludable en todos los aspectos (¿o será sólo mi imaginación y le está pasando lo que le paso a nuestra moneda de a nickle?).

Al ver la pequeña moneda de 16,25 mm de diámetro y 1,36 mm de grosura, que la levanto de entre la tierra que ponen para que la gente no se resbale por eso de la nieves. Mugrosa, llena de lodo y más pequeña que la huella digital de mi dedo gordo la waché con detenimiento absorbiendo con detalle la sorpresa de haberme encontrado susodicho artefacto moderno de medio de trueque. Como es de costumbre cada vez que hago este tipo de actos me dio pena agacharme a levantar una moneda sintiendo quince mil miradas encima de mi viendo que es lo que hací­a y todo por un vil centavo, aunque no cualquiera es menester enfatisar.

Como todos los paí­ses de la unión monetaria tiene su propia moneda le di la vuelta a la moneda de cobre para ver su origen pero hablemos mejor de la portada primero pues es lo único similar que tienen todas las monedas de la UE. Aparte del número obligado, o sea el 1, tiene una imagen de un globo terraqueo inclinado en un eje rotacional que parece estar más tildeada a la constelación Vega que a Polaris quizá anunciando una moneda para los milenios más que nada.

De todos los lugares que uno se pueda imaginar en Suecia encontrarse uno una moneda de la UE, o sea Finlandia o Alemania (Noruega y Dinamarca tampoco pertenecen a la unión monetaria de la UE) fue Italia la que se llevó el premio del dí­a. Su porte me llevo a investigar el susodicho edificio que se encuentra acuñado en su espalda (que serí­a el águila para nosotros) y se trata nada menos que de la fortificación de Castel del Monte que data del siglo XIII. Pero tampoco es cosa de la gran sorpresa, no me encontré el penny en cualquier parte de Estocolmo, me lo encontré en la vecindad de los apartamentos de la universidad, y por acá hay cualquier cantidad de estudiantes del resto de Europa.

Casi van para los 6 años ya desde que las monedas y los billetes euros tienen de vida como tales pero apenas si tres en plena circulación y hoy tuve la suerte de dar con uno en el suelo, vaya, puse mi cruz en suelo por eso de la suerte y vi que vení­a el bus, me subí­ pensando en la integración europea pero eso será un tema para otro post como dice Doña Cuca.

Mind reading

¿y si yo fuere el único en todo mundo que no pudiese leer mentes, qué tal me irí­a?

Mi mente piensa aparte algo de los demás. Me da risa. Veo pasar al resto de lo seres humanos en mi camino. Les digo de cosas. Por ejemplo, si alguien me cruza la mirada les contesto con una risa apacible mientrás mi mente desarrolla otro discurso, ¿Qué miras pendejo?, Y si miro a una mujer que me despierta mis apetitos sexuales el discurso se vuelve más interesante, mientrás mi mirada les busca con los ojos desnudarlas mi mente habla, pero claro, en cuanto siento la mirada de ellas mi actitud cambia pero sigue por igual el piropo que quisiera más que nada decirles, en México lo harí­a, aquí­ no, “qvole mamacita; ay, pero que buenas nalgas tienes cielo” (el mexicano bronco en mi) se desarrolla. Y si es un cualquiera: Y ese, esa ropa le sienta mal. Les trato de adivinar su raza … Ese es Hindú sin duda alguna. Y esta, ¿de qué raza es? Por igual si mis oidos alcanzan a escuhar las palabras que el aire lleva de sus conversaciones mi mente se adelante y les dice, “callese”. Quizá todo sea mi ser tijuanense, el carrilludo que no quiere perecer.

El discurso sin modales es cruel en la privacidad de mis pensamientos. La fachada, la máscara, los hace más interesantes pero no menos francos aunque de franco a franco son dos cosas muy distintas.

Cosas así­ por el estilo pasan a diario por mi mente, es un soliloquio interesante por la libertad en que desarrollo esta parte oculta de mi ser que nadie escucha más que el saco de huesos éste que llevo a diario.

Bueno, si es que los demás pueden leer mentes entonces ya saben como soy, pero son mis fantasias sexuales las que más me darí­an vergíüenza si supiere que todos los demás de hecho pueden leer mentes y yo soy el único freak del mundo que no lo puede hacer igual…. Me siento desnudo.