Yonder Lies It

El mal uso de la biblia cristiana

Realmente me tiene sumamente cansado. Nosotros, el Occidente, los dizque más libres, los más educados vivimos en un mundo dictado por un libro que ni nadie sabe a ciencia cierta de dónde provino o sí­ es en verdad la palabra del fulano ese. Nuestra memoria colectiva está impregnada de sus historias y sentimos simpatí­a por ellos y ellas por doquier que se esté en el mundo Occidental. Por eso la guerra contra el Terrorismo, en cierta parte, se debe a un renacimiento de las Cruzadas.

Hace mucho que dejé de creer en la biblia pero durante un tiempo negro de mi vida al cual se me es imposible relatar aún de ello, por eso del qué dirán y las vergíüenzas que siento que pasarí­a, no lo relato pero baste decir que durante ese tiempo tuve la oportunidad de leerme la biblia al revés y al derecho. Inclusive un tiempo durante mi pubertad fui acosado por el pensamiento más vil que ese libro pudiese ocasionar en un jovenzuelo como yo de esos pasados abriles. Según dice la biblia no entrará al reino de Dios aquel que insulte al Espí­ritu Santo (ver Mat 12:32), cosa que mi obsesiva personalidad de 12 años y avidez lecturil ocasionaron en mi una crisis espiritual de proporciones catastróficas. Por mucho tiempo me sentí­ condenado al infierno y afortunadamente desistí­ hace mucho de creer en las muchas contradicciones que ese libro conlleva y al cual considero un libro infernal hoy en dí­a.

Serí­ase no hace ni más de 15 años atrás que descubrí­ otros medios de espiritualidad alternas a la biblia. En particular me gustó y siguen gustando las 9 Eneas de Plotinus. Plotinus me gustó porque para él la espiritualidad es más allá del mal y el bien, es más bien un libro del cual muchos se han beneficiado e inclusive dirí­a que es la biblia de los intelectuales. Dante, St. Augustine, Schiller, Edmund Spencer, Wordsworth, Coleridge, Ralph Waldo Emerson, Tennyson son unos pocos de los cuales este filósofo ha influenciado. Y es que habla de La Belleza, del Uno, La Verdad, y son conceptos abstractos que elevan el espí­ritu. Se dice que influyó mucho al cristianismo y pues no es de dudarse. Los conceptos de monoteí­smo están ahí­ pero sin ese aspecto castigante que la biblia contrae con su lector.

Todo esto me viene a la mente porque la pelí­cula de Mel Gibson La Pasión esta moviendo a diestra y siniestra a la derecha que gobierna al pedazo terráqueo este. Me cae gordo leer que los Israelitas le pidan al Papa que se manifieste en contra de la pelí­cula esa. Me cae gordo que la gente se ofenda por unas estúpidas historias que nada tiene que ver con la realidad. Si Jesucristo fuera en verdad el bueno no dejarí­a que pasará tanta pendejada en el mundo, es un dios cruel en verdad. Y más me socava la razón ver al Occidente bajo sus garras virulentas. Si en verdad fuésemos tan democráticos como no la pintamos no estuvieren ahí­ los mendigo polí­ticos sinvergíüenzas apostando su capital polí­tico yendo a la iglesia o apelando a las congregaciones por sus votos. Para mí­ la biblia es peor que la ignorancia. Deberí­amos mejor optar por una religión más pacifista o inventar otro para los próximos dos mil años.


Publicerat

i

av

Etiketter: