American Citizen

Me mandaban a comprar peanut butter, sabí­an, por eso lo hací­an. Y la verdad me daba cierto orgullo hacerlo, pero como todo en mi vida, fuera de Tijuana soy el más sólo del mundo, nadie más podí­a hacer las tranzas que yo me aventaba, así­ que divagaba sólo por los entonces aquellos centros comerciales. Unos na’más me mandaban pa’ver si lograba la hazaña, pa’ ver si era cierto que podí­a, siempre lo lograba. Dos veces me torcieron na’más, pero porque ni la disimulaba, después lo alze a una forma de arte, me les pasaba hablando español, desafiante, briago de ideologí­a chicana. Jamás utilice mica. Nunca los ocupé, ni los procuré aún viviendo y estando allá. Ser chicano para mi fue una cuestión de polí­tica que practicaba en mi vida. Pasaba como perro en mi casa. Esta mañana me acorde de una vez que pase. Llegando a revisión le dije al migra: ‘American Citizen’, se me quedo de wachas y me dijo. ‘How do I know you’re an American?’ Me patinó el cocois. Más ya estaba tan impuesto pasarles sin papiros que ni nervioso estaba. Le contesté: ‘You don’t.’ Na’más me hizo un gesto con la mano, ’pasale’, era todo lo que necesitaba. Pase sin más.

Off course, todo eso fue antes del 9/11 …

Lämna ett svar