Al final del dí­a

Lo más importante es poder salir del dí­a sin odiar a nadie, sin raspaduras.

Llegar a la cama, sin pena ni gloria y poder dormirte de saber haberla logrado. La esencia de uno la libró; no se lleva uno ningún malestar a la almohada. No hay sudor alguno al respecto, no existe evidencia de la lucha librada al querer conciliar el sueño, pero no es siempre así­, hay veces que el dí­a no deja para más, hoy sí­,creo que le he librado, lo digo con mucha precaución. Y es que uno no sabe el rencor que el dí­a deja por igual. Las acciones de uno repercuten como aquella piedrita que uno lanza al agua y en espera de ver ondas, o ver la piedra rifarsela arriba del agua se queda uno abstraí­do en las ondas de sus sus repercusiones.

Hoy me voy sin rencores a mi lecho, me voy a la cama sin pena ni gloria, así­ creo creerlo.

Comprendo que mis acciones del dí­a quiza no hayan sido así­. Muy a pesar de lo que yo idealice aquí­, sé que basta conque haya hecho un gesto, dar una mirada malinterpreteda, un paso equivoco para arruinarle el dí­a a otro ser humano.

No en balde eso de las alas de las mariposas, el aleteo causa ondas profundas en la tela de la vida, el tiempo, la existencia, no hay que jugar con eso, pero no hay tiempo, ni para detenerse para observar el tejido de ello.

No es fácil para nada: saberte en el tejido de mi vida

Still obsessed

No sé que da eso

Letras sin esperanzas, un malestar (sueño)

Que fácil hacer todo

tan lejos de dios

Aún así­ la hipocresí­a me delata

No hay que confiar en uno mismo

sin ella