reach out and touch me

El psicólogo Abraham Maslow, propuso en una cierta pirámide el desarrollo del ser y sus necesidades primordiales. O sea, antes de que puedas pensar en el bienestar de la humanidad, o sea el prójimo, primero habrá que complacer las tripas. Sí­ las tripas crujen de hambre, la primera necesidad es apacigíüar el rugimiento del área estómocal. Muchos, inclusive yo, han utilizado está teorí­a de una manera más universal dentro del ramo sociológico. La teorí­a puede ser aplicada a las sociedades.

Se me vino a mente esto hoy por la mañana cuando le dí­ la vuelta rigorosa al blog de Sean Paul Agonist.org.

Ahí­ han hecho varias recensiones de varios libros escritos en inglés sobre las aventuras de individuos que compartimos la frontera esa gabacha-mexicana.

La narrativa no suele cambiar pero aún así­ es interesante ver si las perpectivas cambian, aprender del uno del otro.

Cuando me refiero a las perspectivas me refiero a esta manera de ver el mundo que los gabachos tienen al hablar de México. Para ellos, adentrarse a México es adentrarse a un mundo que no es suyo y lo único que los suele guiar es la verdad como ellos la conocen. Por eso cuestiones abstractas como el bien y el mal suelen entrar a la narrativa bajo las auspicias de otros términos más abstractos aún como la justicia. Los gabachos aún no salen de esa mentalidad del Wild West al referirse a México por eso muy rara vez he visto narrativas que no involucren al sistema de justicia de ambos lados al relatar los aconteceres que embargan a ambas naciones por cuestiones de apoximación geográfica.

Y no hablo de traducir xicanos, latinos, hablo de traducir gabachos, gíüeros, y su manera de vivir San Diego, Los Angeles, San Ysidro.

Por cuestiones de diferencias ideológicas y no como nos harí­an creer la gente ajena a la frontera con sus castillismos, con sus palabras finas, con sus cultismos, la división que separa un acercamiento entre Tijuana y San Diego, a nivel intelectual, a nivel tú por tú, es más bien polí­tica y sospechismo entre ambos que un nivel intelectual, o sea, los fronterizos estamos al nivel cultural de los EEUU y en veces hasta mucho más superior que los gabachos mismos así­ como ellos son superiores en otros aspectos.

Pero es la polí­tica que nos impide acercarnos los unos a los otros. Y no deberí­a de ser así­. Algún dí­a habrá un mini renassaince entre Tijuana-San Diego, algún dí­a ellos traduciran nuestros textos y algún nosotros traduciremos los textos que ellos producen, por el momento, esa actividad está low key.

Hay mucha hambre polí­tica de por medio aún.


Technorati Tags: ,,

Lämna ett svar